Page 15 - Primer informe parcial de fiscalización - Cuenta Pública 2022
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El proceso de fiscalización comprende las
siguientes etapas:
En esta fase se identifican y evalúan los riesgos,
se definen el alcance, los procedimientos y el
plan de auditoría. Los principales elementos de
esta fase incluyen la comprensión del entorno
de la entidad auditada, la identificación de las
áreas de riesgo y la preparación de un plan
detallado.
La planeación es el proceso en el cual el
auditor decide cómo se llevará a cabo la
revisión, con base en la comprensión
detallada del sujeto de fiscalización, su
entorno y su sistema de control interno.
Uno de los principales beneficios de la
planificación de la auditoría es la eficiencia.
Una auditoría bien planificada permite a los
auditores concentrar su tiempo y esfuerzo
en las áreas de alto riesgo y evita la inversión
innecesaria de recursos en áreas de bajo
riesgo. Además, la planificación promueve la
efectividad, ya que permite identificar
errores materiales y que los auditores
ajusten sus procedimientos para abordar
riesgos específicos.
La planeación también contribuye a la
calidad de la auditoría. Una auditoría bien
planeada garantiza que los auditores
comprendan plenamente las atribuciones,
funciones y operaciones del sujeto de
fiscalización, lo que les permite identificar
las amenazas y los riesgos asociados con la
entidad auditada.
La fase de planeación se divide en
planeación genérica y específica.
